Plenilunio es una novela policiaca de Antonio Muñoz Molina escrita en 1997. Es la octava novela que escribió el escritor y con ella tuvo un gran éxito. Según el escritor, se inspiró en una noticia y una foto que vio siete años antes de escribir la novela en un periódico americano. La noticia hablaba de un juicio y la fotografía de la cara del acusado, un hombre joven con las manos cruzadas.
Ha sido definida con «una novela de género policíaco bastante original», ya que va más allá de la historia del crimen y su resolución. Al escritor Antonio Muñoz Molina le interesa conocer la vida de los personajes y saber cuál ha sido su motivación para realizar el crimen.
Resumen de Plenilunio
La novela Plenilunio cuenta la agresión sexual y asesinato de una niña llamada Fátima que tuvo lugar a finales de la década de los noventa del pasado siglo en una pequeña ciudad del interior sur de España. El Inspector encargado del caso, cuya esposa está ingresada en un sanatorio mientras él se debate entre sus pensamientos, lucha entre el fantasma del miedo por el temor a un atentado de ETA, a causa de su pasado en el País Vasco y un pasado que intenta olvidar.
El inspector empieza a sentir la influencia del padre Orduña, un viejo jesuita que fue su profesor durante la infancia. El protagonista de la novela tiene la obligación de detener al asesino psicópata que será descubierto tras su segundo intento de asesinato.
Personajes
El inspector
es uno de los personajes más importantes de la novela Plenilunio. No se conoce su nombre como el del asesino, aunque sí que se ofrece información sobre su vida. Al regresar al pueblo en que estudió, procedente del País Vasco, se tiene que enfrentar a sus orígenes, como hijo de padre represaliado tras la guerra. Tendrá que entrar en un colegio de curas para su reeducación en unos valores totalmente contrarios a los de su familia. Después estudiará derecho y se hará policía.
El padre Orduña
durante su juventud en la Guerra Civil, fue alférez provisional del bando franquista. Después se convertirá en religioso e intentará ayudar a los que estaban internos por ser huérfanos del bando republicano o a hijos de los que estuvieran en la cárcel-
Susana Grey
es la maestra y fue la esposa de un artesano intransigente en sus opciones políticas y sociales que cada día se va volviendo un hombre más amargado. El artesano antifranquista la abandona por otra mujer y desde entonces Susana comienza a sentirse libre. A finales de los noventa, se enamorará del policía. Un hombre sin problemas para contar su pasado y del que no le pueden separar ni sus ideas políticas ni sus preocupaciones.
El asesino
es un personaje que no tiene nombre del que el narrador proporciona muchos datos sobre su vida. Con 23 años tiene que levantarse de madrugada para trabajar como pescadero. Además, odia a sus padres a quienes culpa de haber cortado sus expectativas para el futuro y a los que desea ver muertos.
El forense Ferreras
es el que proporciona los datos de la niña muerta. Además, es el que conoce el pasado de Susana Grey con la que tiene relación desde los tiempos de estudiante y de la que sigue siendo su gran amigo y confidente. En sus conversaciones con el inspector intentará ayudarle a descubrir al asesino de la niña fallecida. Un hombre charlatán que contrasta con el carácter introvertido del inspector.
Fátima y Paula
son las dos niñas víctimas del pederasta y se mencionan únicamente por sus nombres. Dos niñas inocentes y responsables que son las víctimas de la novela. Por último, podemos citar al personaje de la prostituta que es secundario, pero tiene la clave por haber observado al asesino durante mucho tiempo.
La lucha interna del asesino que no acepta su perversión y su locura debería firmar parte del resumen de la historia.